El Rey León

El Rey León es uno de los musicales más famosos de la historia y que más impacto ha causado en los espectadores en todo el mundo. Esta obra está basada en la película Disney, que posee el mismo nombre, y se estrenó como musical en Broadway en 1997. Esta gran producción llega a Londres en 1999, consiguiendo así su entrada en Europa y estrenándose en 2013 en España. La ciudad que acoge este musical en Latinoamérica es México en 2015.

La puesta en escena de El Rey León se caracteriza en primer lugar por la representación de los protagonistas. Algunos tienen forma de marionetas de tamaño real, como es el caso de Zazú o Timón; mientras que otros, como los leones o las hienas, son los propios actores los que, disfrazados y complementándose de miembros u objetos externos, encarnan los personajes en cuestión. Bien es cierto, que en el caso de las marionetas, los actores han de medir mucho los movimientos corporales para no destacar por encima de la marioneta a la que están adheridos, pues ellos van camuflados para no distraer con su cuerpo demasiado la atención del espectador. 

Zazú (personaje en forma de marioneta)

Leones (actores que usan su propio cuerpo)

Otro aspecto a destacar es la escenificación o ambientación. La utilización de la diferente iluminación es vital para ir entendiendo el paso de la historia, pero cabe resaltar que predominan los colores anaranjados para el día, para aparentar la luz que caracteriza al continente africano, y los azules y verdes para la noche. El elemento que también identifica a la perfección este musical es el gran sol que se alza al comienzo y cuya forma es de lo más característica. El gran dinamismo de los diferentes escenarios hace mucho más ágil el transcurso de la trama, así como el cambio de escenarios. 

El sol de El Rey León

En cuanto a la música… es totalmente brillante. La presencia constante de la percusión típica africana le da veracidad y un carácter que hace que el espectador deje que su imaginación viaje a otro país y se meta en la situación que se desarrolla sobre el escenario sin moverse de la butaca. Los ritmos africanos se coescribieron para el musical y el encargado fue Lebo M. Con este añadido se enriqueció todavía más la composición de Elton John y Tim Rice. Pero no se puede dejar de lado la importancia de los coros en las canciones de este musical. Las voces que complementan a los protagonistas en cada canción están perfectamente compuestas en cuanto a armonía, pero no sólo eso, sino que ayudan a situar o ampliar el significado de las canciones. Sin el coro esta obra maestra estaría coja y su música sería mucho menos llamativa y conmovedora.

Instrumentos africanos que se utilizan 

Si hubiese que sacar a relucir alguna cosa negativa, sólo se podría hablar de la sobreexplotación de algunos actores, los cuales, después de hacer un pase todos los días, tienen que realizar “doblete” los fines de semana. Esto repercute en el cansancio físico y psicológico, pero principalmente en la voz. En algunas ocasiones, debido al esfuerzo o al agotamiento, los profesionales no vocalizan bien y dificultan el entendimiento de las frases a los espectadores en los diálogos, pero, sobre todo, en las canciones. Pero esto ocurre en muy contadas ocasiones, pues el elenco está formado siempre por grandes artistas con una gran preparación.

Puntuación:

8/10